China.org.cn: Hablábamos anteriormente de la distancia geográfica entre Chile y China, una distancia a la que en ocasiones se suma la distancia cultural, que puede incluso tener influencia en las relaciones comerciales entre los dos países. En este sentido, Chile y China están llevando a cabo una serie de actividades con el objetivo de reforzar los vínculos culturales entre ambas culturas. Por ejemplo, en la actualidad, en el Palacio de la Moneda, se celebra una exposición de los Guerreros de Terracota del Ejército de Xi’an. ¿Cómo se ha conseguido organizar esta exposición, de dónde partió la iniciativa y cuál ha sido el proceso hasta conseguir llevarla a cabo?
Embajador:Esta ha sido una tarea larga de tres o cuatro años. Una de las tareas que la Presidenta, cuando me despedí de ella antes de venir a tomar mi cargo, me dijo “ojalá consiga traer los Guerreros de Terracota a Chile”. Yo me propuse trabajar en eso, fui muy bien acogido por el Ministerio de Patrimonio y con mucha amistad fuimos viendo las posibilidades. Pero me di cuenta de que, si uno quería llevar una exposición de los Guerreros de Terracota a Chile, era bueno traer primero algo nuestro para acá. Entonces trajimos la exposición de los indígenas mapuches del sur de Chile, con sus tejidos, su música, su religiosidad... Esta exposición se llamó ‘Mapuches, semilla de Chile’, y estuvo en el Museo Capital desde mediados de abril de 2008, inaugurada por la propia Presidenta de Chile, hasta fines de junio, de modo que fue un periodo largo de encuentro de un aspecto esencial de nuestros orígenes con el Pueblo Chino. Los niños que pasaron, la gente, los comentarios que hacían, algunos simpáticos, como “los chilenos de allá son muy parecidos a nosotros”, cuando veían las fotografías. Y hay algo de razón. Pero creo que fue ese antecedente el que ayudó a llegar a un acuerdo y que las autoridades de la provincia y del museo decidieran llevar una exposición. Los Guerreros de Terracota van a estar allí seis meses, y nuestras cosas han estado acá. Todo esto tiene que ver con la lógica de conocernos más. El 2010 estará marcado por una buena exposición de pintura china que nosotros queríamos desde hace tiempo, con toda la admiración que tenemos por la acuarela china, la tinta negra... Pero lo que queremos es mostrar qué pintan los pintores de la China del siglo XXI, qué dimensiones muestran en áreas como el 798, constituyendo una expresión que está conquistando Europa, Estados Unidos y otros mercados del arte. Una muestra importante de pintores chinos irá a Chile. Y del mismo modo, una muestra del arte de vanguardia de Chile vendrá a una de las grandes galerías para presentarse aquí. Todo esto está muy bien, pero yo creo que hay un tercer aspecto que hay que trabajar más. Lo hemos hecho en esta embajada, con modestia y avanzando; no se trata sólo de lo que llevas y traes, sino de hacer cosas juntos. Por ejemplo, hemos hecho que artesanos de papel cortado hicieran figuras con imágenes chilenas tomadas de fotografías, cerámicas... O el grupo de chicas estudiantes de conservatorio que aprendieron a tocar música chilena y latinoamericana con instrumentos chinos, que con frecuencia se han presentado acá durante estos tres años. ¿Qué queremos decir con eso? Hicimos una exposición fotográfica llamada ‘Chile visto por ojos chinos’, que reunía fotografías tomadas por chinos que habían pasado por nuestro país. Todo eso apunta a la idea de “cómo yo entro en lo tuyo, cómo expreso mi mundo en tus expresiones milenarias”, y eso es un trabajo que podemos tomar y extender. Podemos hacer una película juntos, telenovelas, muchas cosas en las dinámicas culturales contemporáneas. Por ahí va también la mano para el futuro.
China.org.cn: Y otro aspecto es el idioma. ¿Cuál es la situación de la enseñanza de la lengua china en Chile?
Embajador: En 2000, era cero; en 2010 estaremos con una cantidad importante de escuelas y colegios particulares y públicos con clases de chino. Los niños chilenos poco a poco se están interesando por aprender chino. Los estudiantes egresados de las universidades o a la mitad de los estudios universitarios se vienen aquí por un año o dos años para estudiar chino. No habían practicamente estudiantes chilenos aquí en Beijing. Ahora hay una cantidad importante para nosotros, cerca de 60 estudiando chino. Hay un signo; por supuesto, hay una complejidad en el idioma, hay una cierta dificultad, pero hay que atreverse a decir ‘nihao’ y aprender a comunicarse. Yo creo que uno de los retos en el futuro será también que la gente sepa chino e inglés. Esos son los desafíos que vienen de las interacciones en el siglo que estamos viviendo.