China.org.cn: El próximo 17 de enero se va a celebrar la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Chile. Según el resultado de esas elecciones, ¿se puede esperar algún cambio o un nuevo enfoque de esas relaciones entre Chile y China?
Embajador: Yo diría que no en el sentido de cambio estratégico. Chile tiene una visión de estado con respecto a sus relaciones con China, una mirada de continuidad, un enfoque. Puede haber aproximaciones distintas, sectoriales y puntuales, porque ese es el proceso natural de la evolución de una relación diplomática. Pero la mirada que Chile como estado tiene hacia China es de largo plazo, con definiciones que constituyen fundamentos discutidos y analizados en los distintos foros del país, con las distintas fuerzas políticas. Hemos tenido con mucha frecuencia la acción del llamado mecanismo parlamentario de diálogo entre China y Chile. Muy pocos países tienen ese mecanismo de diálogo con China; Chile lo tiene, y ese mecanismo ha funcionado con parlamentario tanto del gobierno como de la oposición, alrededor de esta mesa, en el Ministerio de Relaciones, en la sede del Partido Comunista, en la sede de la ANP... Ahí han estado los representantes. Incluso más: quien encabeza la delegación en los últimos dos años ha sido un senador de los partidos de oposición actuales, de tal modo que, cualquiera que sea el resultado electoral, lo que está claro es que hay una continuidad en el desarrollo y el crecimiento de las vinculaciones de Chile con China y que lo que se busca son líneas de cooperación mayores, nuevas, distintas. En áreas de políticas públicas, incluso, entre China y Chile. Éste fue el acento del documento que presentó la Presidenta Michelle Bachelet al Presidente Hu Jintao en Singapur en la última reunión de la APEC, en su encuentro bilateral. Fuimos el primer país que entregó formalmente la respuesta de Chile al documento blanco que entregó China en noviembre de 2008 donde propone unas medidas de enfoque para su relación con América Latina. Chile analizó y estudió ese documento, lo identificó por secciones y, como consecuencia de ello, se entregó formalmente lo que llamamos la Respuesta de Chile al Documento sobre la Política de China hacia América Latina y el Caribe, que tiene un enfoque predominantemente bilateral, pero que también tiene nuestro enfoque, de cómo vemos ese conjunto de medidas para nuestra cooperación. Sin duda, ese documento constituye uno de los fundamentos del desarrollo futuro.