China.org.cn: El TLC firmado en abril de este año entre Perú y China fue ratificado el 6 de diciembre de este año. ¿Qué ámbitos se van a fortalecer con la cooperación y los intercambios entre China y el Perú tras la vigencia del TLC?
Embajador: Lo que el Perú exporta a la China -soy peruano y tengo que hablar por el interés del Perú en primer lugar- son fundamentalmente los minerales, que son los productos tradicionales, no podemos negarlo. Y eso constituye el grueso de la exportación peruana. Pero el TLC yo no lo veo tanto para facilitar esa exportación tradicional, sino como una herramienta para facilitar la promoción de los productos no tradicionales en la exportación peruana. Y en eso tenemos que tener una esperanza sustantiva. Los empresarios peruanos tienen que estar a la altura del tratado y tener la imaginación y la valentía necesaria para incursionar en el mercado chino con decisión, y el mercado chino es un mercado exigente. Me estoy refiriendo a productos novedosos, como por ejemplo la manufactura y la ropa peruana, los juguetes, las medicinas que son buenas e interesantes. Pero también los bienes culturales, que para nosotros significan algo. No olvides que la nuestra es una cultura que viene de atrás, como la de ustedes. Y ahí es donde yo veo los desafíos de este TLC y ojalá podamos obtener el beneficio esperado.
China.org.cn: ¿Qué beneficios traerá el TLC a ambas partes en cuanto a superar la crisis económica?
Embajador: Habrá que esperar a cuando veamos el primer año los negocios que se han hecho, como están las figuras en el comercio bilateral. Creo que hay buenas expectativas. El Presidente de la Comisión Consultiva Política del Pueblo Chino, Jia Qinglin, estuvo en Lima hace tres semanas, y precisamente tratamos ese tema con el Presidente del Perú, el Dr. Alan García, que también tiene muchas esperanzas en que el comercio se reproduzca geométricamente. Hoy tenemos una balanza comercial de más de 7.000 millones de dólares; si recuperamos los índices de crecimiento a partir de la crisis, creo que en dos o tres años podríamos estar en 12.000 y 15.000 millones de dólares. Tampoco soy un especialista en ese tema y preferiría esperar un poco a ver cómo se comportan los agentes económicos.