La falta de lluvias en la Amazona brasileña provocó un estado de emergencia en 15 municipios, donde han sido afectados 215.000 habitantes, informó hoy el coronel Roberto Rocha, subsecretario de Defensa Civil del estado de Amazonas.
La sequía afecta principalmente a los alrededores de Manaus, capital de Amazonas, y a la región del Alto Río Negro, donde los pobladores sufren también con el humo de los incendios forestales que la falta de lluvia no permite sofocar.
La Defensa Civil del estado de Amazonas clasificó la intensidad del desastre natural de nivel 2, a través de una medición que evalúa los daños materiales y ecológicos, además de los perjuicios sufridos por la población.
De acuerdo al mismo órgano, el nivel 2 implica que la situación es anormal pero con daños superables si se ejercen las acciones necesarias para el abastecimiento de las regiones involucradas.
Rocha dijo que alimentos, filtros e hipoclorito de sodio son distribuidos en las áreas afectadas por la sequía de los ríos para evitar que la población consuma agua que no es potable.
El coronel también dijo que el bajo nivel de oxígeno en el agua del río Manaquiri causó la muerte de miles de peces.
“Es normal que algunos peces mueran, pero este año el río se secó por completo”, agregó.
La sequía golpea al estado del Amazonas desde octubre pasado y según las previsiones meteorológicas deberá llover en la región a partir de febrero del próximo año. Fin