La cifra de muertos tras la gran masacre de esta semana en el conflictivo sur de Filipinas asciende a 64 personas, incluídos periodistas, según revelaron fuentes oficiales este sábado.
Las fuerzas de seguridad recuperaron más cadáveres al limpiar la montañosa aldea de Salman, donde docenas de personas, entre las que figuraban 30 periodistas, familiares, abogados y seguidores de Esmael Mangudadatu, fueron atacadas el lunes, según dijo Roger Zagales, inspector jefe del Grupo de Investigación Criminal y Detención de la Policía Nacional de Filipinas.
Zagales confirmó que desde el lunes que habían recuperado al menos 64 cuerpos. Fin