El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, propuso hoy posponer las elecciones del 29 de noviembre hasta que sean restaurados los poderes del Estado tal como estaban antes del golpe de Estado, el 28 de junio.
En un comunicado, Zelaya dijo que "la convocatoria a elecciones generales ordinarias en un Estado de facto, sin que previamente se haya restauradola democracia e, instalado el gobiernode unidad reconciliación son una aberración jurídica, una burla y un engaño al pueblo".
Agregó que es urgente presentar soluciones legales a la crisis.
"Posponer las elecciones debe ser una condición que permita legitimarlas que nos devuelva al estado de derecho al orden constitucional y la credibilidad internacional con un acuerdo político o irremediablemente tendrían que repetirse hasta que se sea restaurada la voluntad del soberano", afirmó.
Para Zelaya, reprogramar las elecciones debe ser una condición que permita legitimarlas.
En el documento se resalta que los comicios no son la solución al golpe de estado porque sus resultados estarán al margen de los valores propios de la concepción más elemental de la formación del estado de derecho.
"El Acuerdo Tegucigalpa-San José, para restaurar la democracia, fue el instrumento político propuesto para restaurar legalmente el orden constitucional y realizar elecciones legítimas el acuerdo fue incumplido en sus tiemposy en suforma por el régimen de facto", detalla.
Los hondureños están convocados a elecciones el 29 de junio cuando elegirán un presidente, tres designados presidenciales, 128 diputados, 298 alcaldes y 20 diputados al Parlamento centroamericano (Parlacen). Fin