Cuando una familia finalmente está frente a su tan esperado hijo, el momento es mágico para los padres, debido a que su "largo sufrimiento por el vacío fue llenado", comenta la jefa de la Asociación de Adopción de Padres Franceses de Niños Chinos.
Hasta ahora, unas 150 familias se han registrado como candidatas para la adopcion, señaló a Xinhua la presidenta de la Asociación, Donia Muller, añadiendo que la Asociación en la única en Francia que maneja la adopción de niños chinos.
Muller comentó que esas familias valoran a su niño adoptado porque lo o la consideran como el "más valioso regalo" que les ayudará a completar una familia.
ELLA TIENE EL DERECHO DE CONOCER SU PASADO
Alice es una niña china adoptada de 10 años de edad y actualmente vive con su madre profesora y su padre médico en París. Ella se sienta y escucha tranquilamente a su madre adoptiva Demerliac, cómo cuenta la historia de la adopción a Xinhua.
Demerliac dijo que ella y su esposo esperaron tres años después de presentar su solicitud por un niño chino. Finalmente conocieron a Alice en Shanghai y se la llevaron a París.
"Valió la pena esperar tanto. El pequeño ángel nos ha traido felicidad", afirma, mostrando a Xinhua un gran álbum de fotos que documentan los primeros años de Alice en un orfanato de Shanghai.
Demerliac comentó que frecuentemente observa cuidadosamente las fotos con Alice, ya que cree que es necesario para que la niña se entienda a sí misma plenamente.
"Ella tiene el derecho de conocer su pasado", expresó.
"Han pasado ocho años y Alice ha crecido convirtiéndose en una niña totalmente francesa. Ella tiene el mejor desempeño en todas las clases. Estudia guitarra, natación y le gusta viajar y leer", narra Demerliac con orgullo.
Añadió que espera adoptar otra niña china de 3 años a finales de octubre.
YA NO MAS "ABANDONO", SINO "DON"
Abigail de 3 años fue considerada hija de Amelie desde antes de que se conocieran. Amelie ha escrito blogs acerca de ella desde que el centro de adopción le informó sobre la adopción en julio del 2008.
Abigail fue abandonada al nacer debido a su labio leporino, sin embargo, Amelie y su esposo la aceptaron con afecto de un orfanatorio en Taiyuan, capital de la provincia noroeste china de Shanxi.
Aparte de buscar las formas de curarla, la pareja hace su mejor esfuerzo para criar y educar a la niña con la esperanza de formarle un carácter fuerte.
"Cuando Abigail crezca, prodía preguntarnos porqué fue abandonada", dijo Amelie. "Estamos preparados para responderle así: la palabra abandono incluye un don", que en francés significa regalo, por lo que la niña es "nuestro regalo de Dios".
NO OLVIDES DE DONDE PROVIENES
"Esperé siete años por Lucie Xuan, mi primera niña china", comenta Simon, de 38 años, al empezar a contar su historia con un ligero suspiro. Ella conoció a Lucie en el 2003 en Hengshan, en la provincia sureña china de Hunan, cuando la niña apenas tenía 8 meses de edad.
"Lucie parecía sentir la partida de su patria y lloraba mucho", recuerda Simon. "Pero cuando la abrace, ella dejó de llonar. Me sentí embargada de una felicidad maternal en ese momento".
La mamá llevó muchas cosas chinas a Francia para el nuevo miembro de la familia. Con el fin de evitar la soledad de la niña, ella se dormía junto a Lucie cada noche desde la adopción. Aunque tradicionalmente las familias francesas suelen dejar que un bebé duerma solo, comentó.
Simon conserva el nombre chino de Lucie, Xuan, porque ella dice, "espero que mi niña china esté orgullosa de su lugar de origen en el futuro. Yo quiero decirle: no olvides de dónde provienes". Fin