
Activistas de la organización Greenpeace pidieron hoy a los países desarrollados, en medio de una tormenta simulada en Barcelona, que no jueguen con la supervivencia de los países más vulnerables al cambio climático.
Miembros de la organización Greenpeace produjeron, dentro de dos grandes contenedores, viento, niebla, lluvia, rayos y truenos, a la puerta de entrada del Centro de Exposiciones de Barcelona, donde están reunidos delegados de unos 180 países.

Los representantes de la mayoría de naciones del mundo tratan de encontrar consenso sobre las medidas a adoptar ante el cambio climático, antes de la cumbre de Copenhague el mes próximo.
De acuerdo con un comunicado de la organización emitido este jueves, la actividad tiene por objetivo recordar a los gobiernos de los países desarrollados la urgencia de lograr compromisos y tomar acciones.
“No firmar un acuerdo ambicioso, justo y vinculante es lo mismo que firmar la pena de muerte para cientos de miles de seres humanos”, declaró a la prensa Raquel Montón, responsable de la campaña de Cambio Climático y Energía de Greenpeace.