La misión de altos funcionarios de Estados Unidos, que arribó hoy a Honduras, se reunió con el depuesto presidente hondureño, Manuel Zelaya, en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, donde está refugiado desde el 21 de septiembre.

Previo a la visita los representantes norteamericanos sostuvieron reuniones con los representantes del gobierno de facto y con los de Zelaya que participaron en un diálogo para solventar la crisis.

La misión, integrada por el subsecretario adjunto principal para el Hemisferio Occidental, Graig Kelly, y el asistente especial del presidente y director principal para Asuntos del Hemisferio Occidental, Dan Restrepo, está encabezada por el secretario adjunto principal para Asuntos del Hemisferio Occidental, Thomas Shannon.

Tras la visita, Zelaya dijo que "se mantiene la misma posición: ni Estados Unidos ni nosotros hemos modificado nuestro apoyo a la democracia, nuestro apoyo al sistema democrático electoral en forma transparente, con igualdad de condiciones" en las elecciones del 29 de noviembre en Honduras.

"Esto es un proceso fraudulento que va a ser negado por las naciones del mundo, y Honduras va a seguir aislado", dijo a la local Radio Globo.

La delegación llegó a Honduras para impulsar las negociaciones para la solución de la crisis que se dieron por agotadas el viernes anterior.

Hoy se cumplen cuatro meses del derrocamiento de Zelaya y la misión espera poner punto final a la crisis.

En una nota de prensa, la embajada de Estados Unidos en Honduras dijo que "la delegación tiene previsto reunirse con representantes de ambas partes a fin de discutir las estrategias para impulsar el proceso Guaymuras (diálogo para superar la crisis)".

La misión "instará a ambas partes a mostrar flexibilidad y que redoblen sus esfuerzos para que la crisis llegue a su fin", señala la nota.

La visita de la delegación de Estados Unidos se produce un día después de la llegada a Honduras del secretario de Asuntos Políticos de la Organización de Estados Americanos (OEA), Víctor Rico. Fin