Los indígenas colombianos condicionaron hoy una mesa de diálogos con las FARC al cese de acciones violentas de esa guerrilla contra pueblos nativos, y aclararon que en eventuales diálogos debe estar presente la comunidad internacional, el gobierno y representantes civiles.

A través de un comunicado la Organización Nacional de Indígenas de Colombia (ONIC) respondió a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) acerca de su disposición para poner fin a hostilidades que dejan miles de nativos víctimas.

"Un primer paso para facilitar este diálogo y bajarle intensidad al conflicto debe ser el compromiso de las FARC de abstenerse de continuar sus acciones criminales contra los pueblos indígenas de Colombia", señalaron los nativos.

Las FARC son uno de los protagonistas del conflicto colombiano que arremeten contra los pueblos aborígenes desplazándolos, reclutándolos de manera forzada o nombrándolos objetivo militar por diferentes motivos.

"Igualmente deben dejar de criminalizar e involucrar a los indígenas en sus filas, además generar una agenda consensuada que nos permita reunirnos en nuestro país o en el exterior, bajo el respeto a nuestra autonomía", agregaron los indígenas en el texto.

En lo corrido del año, los indígenas Awá que habitan el departamento Nariño (limítrofe con Ecuador) fueron víctimas de varias acciones violentas como masacres y desplazamientos, por lo que llamaron la atención del Estado y la comunidad internacional.

La guerrilla, por su parte, admitió participación en una masacre que ocurrió en febrero pasado y manifestó su voluntad de hacer un pacto con los nativos que los deje fuera del conflicto armado.

La ONIC consideró necesario para ese fin que delegados internacionales, representantes del gobierno de Alvaro Uribe que se comprometió a esclarecer los crímenes y reforzar su comunidad, así como defensores y lideres civiles, conformen una mesa de conversaciones. Fin