China.org: Usted acaba de decir que uno de los ámbitos en los que va a trabajar el BBVA en China es el de los préstamos al consumo y en concreto para la compra de automóviles. Y son precisamente el sector crediticio y el sector automovilístico, unos de los que más han sufrido los efectos de la crisis financiera. Así pues, ¿de alguna forma ha sufrido el BBVA los efectos de la crisis financiera aquí en China?
Ramón Gascón: China ha sido el país de todo el mundo que quizás ha sufrido menos el impacto de la crisis en general. De hecho, hace poco salió un dato que muestra el potencial que tiene este país, y es que China ha superado ya en demanda interna y en venta de automóviles a Estados Unidos, que ha sido tradicionalmente el país del mundo que mayor mercado ha tenido. Hoy en día, China es el primer mercado automovilístico del mundo, se esperan vender 10 millones de automóviles en 2009, con lo cual el mercado es prometedor. Nosotros, al ser un negocio aún en fase de implementación, todavía ni sufrimos ni dejamos de sufrir, es decir, todavía estamos en esa fase de desarrollo, de montaje de lo que será la futura unidad de financiación al consumo. Pero lo importante para nosotros es que lo que observamos, sobre todo en los núcleos urbanos, que es donde principalmente pretendemos trabajar, es que se está produciendo la tendencia natural de toda sociedad que crea clases medias, y es que esa clase media se va bancarizando y va demandando productos financieros. El ratio de venta de automóviles financiados y el de venta de automóviles pagados al contado se van equilibrando. Hace varios años los automóviles se pagaban casi todos al contado y había muy poca financiación por varias razones: falta del producto, falta de tradición en el consumidor, falta del hábito también en la entidad financiera, es decir, una serie de circunstancias que hoy en día, lógicamente, van evolucionando igual que lo hace el país. Y nosotros pretendemos desarrollar parte de ese negocio, al menos en la parte que entendemos que conocemos más. Por todo esto, no prevemos ningún problema, excepto los derivados de la propia naturaleza del negocio. Al contrario, como muestra ese dato, el potencial es tremendo, 10 millones de automóviles.
