El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, criticó ayer al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, de quien dijo "dirige una política guerrista" al permitir la instalación de siete bases militares norteamericanas en suelo colombiano.
Durante una rueda de prensa con medios internacionales, el mandatario venezolano reiteró la decisión de su gobierno de romper nexos diplomáticos y comerciales con Colombia, por considerar que las bases militares "apuntan hacia Venezuela".
Chávez dijo sentirse frustrado con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, de quien observó que no es el mismo que conoció en Trinidad y Tobago, donde se celebró, del 17 al 19 de abril pasado, la V Cumbre de las Américas.
"Queremos la paz en Colombia; de ahí mi frustración con Obama. El Obama de Trinidad está desaparecido", agregó.
El mandatario venezolano alertó de que las bases estadounidenses tienen como objetivo la faja petrolífera del Orinoco, considerada como una de las reservas de crudo pesado más grandes del mundo.
Durante casi cuatro horas, desde el Palacio de Miraflores, sede del gobierno venezolano, Chávez dirigió sus ataques dialécticos contra el gobierno colombiano.
Dijo que Colombia es un Estado fallido, donde el narcotráfico ha invadido todos los estratos sociales y poderes públicos, desde senadores, gobernadores y alcaldes. "No sé si al presidente", insinuó el mandatario, pero afirmó que las campañas presidenciales de Colombia han estado financiadas por el narcotráfico.
Chávez rechazó las acusaciones del gobierno colombiano que acusan a Venezuela de entregar armas a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Sostuvo que las fotografías de tres lanzacohetes ATK utilizadas por Colombia para relacionar a Venezuela con las FARC "carecen de sustentación", por ser armamentos desechables.
Durante la conferencia de prensa, mostró un lanzacohetes similar al de la fotografía utilizada por Colombia para acusar a Venezuela de suministrar armas a la guerrilla.
Explicó que el lanzacohetes AT4 es un equipo liviano de corto alcance para tanques utilizado por una tropa de paracaidistas, e indicó que, una vez disparado, el equipo queda obsoleto. "Eso lo sabe Uribe", agregó Chávez, quien también criticó a Suecia, señalada por Colombia como proveedora del armamento a Venezuela.
"Ese es el gobierno de Colombia queriendo chantajear", afirmó Chávez, quien hizo un recuento de la incursión del Ejército colombiano en Ecuador, donde bombardeó el 1 de marzo de 2008 un campamento de las FARC.
Recordó también la captura, en Caracas, de un centenar de paramilitares colombianos en mayo de 2004, según Chávez, y 300 que eran entrenados en una finca para atacar el Palacio de Miraflores.
"Nos sentimos amenazados", dijo Chávez en referencia a las bases militares estadounidenses. "Es como si en la casa de tu vecino hubiera un enemigo declarado, bien armado y además loco", agregó.
"Los yanquis no tienen amigos, tienen intereses", insistió Chávez, quien calificó, además, a las bases norteamericanas como hostiles contra la unión de Suramérica. "Es una verdadera amenaza para el continente", reiteró.
El mandatario denunció la existencia de una operación diseñada en el Pentágono para acusarlo de narcotraficante, a fin de aplicar la fórmula Manuel Antonio Noriega, ex presidente de Panamá, sacado de su país por fuerzas militares norteamericanas en 1989.
Chávez afirmó que en los próximos días viajará a Rusia, donde espera firmar varios acuerdos, entre ellos uno para comprar varios tanques modernos como respuesta ante la amenaza estadounidense desde Colombia. También anunció las visitas de los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, el próximo 11 de agosto, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el 28 de este mes.