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ESPECIAL: Se recrudece y desplaza guerra de coca en Colombia
Agregar a favoritos | Imprimir | e-mail | Corregir   09:10 03-08-2009 / spanish.china.org.cn
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La guerra de la coca en Colombia es más sangrienta ahora que los narcotraficantes se trasladan del suroeste del país a otros lugares, con el fin de evitar los controles militares en los pequeños poblados del departamento de Nariño.

Muchos narcotraficantes han comenzado a dejar Nariño para irse con su negocio de muerte más al norte, en el selvático departamento de Chocó, incluso algunos emigraron a países andinos ante la entrada del ejército y la policía, apoyados por asesores estadounidenses para combatir el narcotráfico.

El departamento de Nariño, que es cosiderada la región con mayor producción de cocaína en el mundo, fue elegido por los narcotraficantes como el principal punto de su negocio en Colombia.

Sin embargo las aspersiones aéreas, la erradicación manual y la presencia de tropas obligaron a los mafiosos a irse a otros lugares, quienes dejaron atrás una estela de violencia, muerte y costumbres opulentas que aún marcan a los pobladores.

Detrás del dinero de la cocaína llegaron las armas, las guerrillas, los paramilitares disidentes, las tropas oficiales, las prostitutas, licores finos y una vida a la que no estaban acostumbrados los indígenas y afrodescendientes que habitan en esa región.

"Ellos llegaron con sus montones de plata y los hombres se la gastaban en tragos que no se veían por acá y en mujeres que llegaban de otros lugares", explicó vía telefónica a Xinhua María Rosero, una habitante de la localidad de Llorente que tuvo que salir junto a sus dos hijos por las amenazas recibidas de grupos paramilitares disidentes.

El alcalde de la vecina localidad de El Charco, Víctor Reina, señaló que la situación es preocupante, debido a que muchas personas dependen aún de los narcocultivos y los planes de erradicación manual han acabado con la economía ficticia en la que vivían cientos de pobladores.

"Si la gente vive de eso y lo van a arrancar pues se van a morir de hambre", señaló al Reina al aclarar que se ha propuesto un plan alternativo para sustituir los cultivos de hoja de coca que tienen en sus parcelas.

Las organizaciones defensoras de derechos humanos en la zona han señalado que las guerrillas, paramilitares y narcotraficantes que lucran con el negocio de las drogas no van a permitir la sustitución de cultivos, a pesar de que los campesinos quieran dejar la siembra de hoja de coca.

El politólogo Pedro Villamizar sostuvo que los narcotraficantes han desplazado su negocio a otros países andinos, debido a los controles emprendidos por las autoridades colombianas.

"El principal factor que ha obligado a los narcotraficantes a salir de Nariño poco a poco son los controles policiales que se han incrementado también por la lucha contra las guerrillas que operan cerca de la frontera", con Ecuador y Perú, agregó Villamizar en entrevista telefónica.

El inmenso despliegue de soldados y agentes antinarcóticos en Nariño se experimentó hace unos años en los departamentos de Putumayo, Caquetá y Guaviare, con economías basadas en la industria del narcotráfico.

Sin embargo la llegada de los militares, acompañados de los estadounidenses, obligó a muchos de sus pobladores a salirse de las mafias.

Con su salida de Nariño, los narcotrafiantes se llevaron el negocio y los dineros, sin que un acueducto, una carretera o alguna obra social haya ayudado a esas comunidades a superar la miseria en la que viven. Fin


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03-08-2009 , Xinhua
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