Miles de maestros en Honduras se incorporaron hoy a sus clases cotidianas, después de casi dos semanas de suspensión por el derrocamiento del presidente Manuel Zelaya el pasado 28 de junio.

Pese a que los dirigentes de la Federación Hondureña de Organizaciones Magisteriales (Fomh) continúan con paralizaciones y protestas por el reintegro de Zelaya al poder, al menos 38.000 docentes asistieron a sus labores cotidianas.

Los dirigentes de la Fomh afirmaron sin embargo que unos 20.000 maestros se mantienen en paro.

Cientos de padres, a través de los medios de comunicación, exigieron el fin de semana el retorno a clases de sus hijos.

Este lunes los padres de los alumnos tomaron diversos centros educativos en el país, desde donde pidieron a la dirigencia magisterial no vincular un hecho político con la educación de sus menores.

El dirigente del Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros (Pricphma), Alejandro Ventura, lamentó que el resto de sus compañeros no hayan asistido este día a impartir clases.

En contraposición, el dirigente magisterial Milton Bardales acusó de golpistas a todos los maestros que regresaron a clases, tras señalar que la Fomh decidió continuar con la huelga esta semana. 

Desde el derrocamiento de Zelaya los maestros se declararon en huelga y anunciaron que no darán clases hasta que el gobierno del presidente impuesto, Roberto Micheletti, ceda el mando al presidente depuesto. Fin