Paul Krugman, ganador del premio Nobel de Economía, declaró el martes en esta ciudad que lo peor de la crisis económica global está por terminar, aunque las persistentes deudas masivas puedan ralentizar el ritmo de recuperación.
"Comparto el optimismo de que lo peor quizás haya terminado", dijo Krugman durante un discurso en un foro internacional llevado a cabo en Seúl, estableciendo que el crédito comienza a fluir gracias a las grandes intervenciones no convencionales por parte de la reserva federal estadounidense y otros bancos centrales.
No obstante, Krugmant se mostró reticente al formular una conclusión sobre el asunto de la recuperación, ya que aún hay problemas de un apalancamiento masivo en las instituciones financieras y deudas excesivas.
"Nos queda toda la deuda excesiva y tendremos un proceso extendido para que tenga lugar la desaparición del apalancamiento", añadió Krugman, haciendo hincapié en que "de ninguna manera estamos en el final de la historia".
"Los gobiernos tienen que actuar como un respaldo para las instituciones financieras", agregó, instando a que las relaciones gubernamentales sean más estrictas en el mercado financiero.
Paul Krugman fue galardonado con el Premio Nobel de Economía en 2008. Fin