Las autoridades de Colombia intentaban hoy determinar los móviles y a los responsables de dos atentados explosivos que dejaron al menos seis heridos en el suroeste del país.

En uno de los sucesos, desconocidos lanzaron la madrugada de este lunes una granada cuyo estallido hirió a dos hombres y dos mujeres en Popayán, capital del departamento de Cauca.

Las víctimas sobrevivieron porque la granada golpeó una columna sin que alcanzara al objetivo en el establecimiento conocido como "Don Berna".

En Neiva, capital de Huila, el estallido de una bomba hirió a una pareja. La policía dijo que el atentado estaba dirigido al parecer contra la fábrica de lácteos Alpina.

La policía consideró posible que ambos atentados fueron obra de guerrilleros que extorsionan a dueños de lugares o empresas.

En Colombia, las autoridades afirman que la guerrilla tiene como principal fuente de financiamiento los secuestros y extorsiones así como tráfico de armas y narcóticos.

Los rebeldes rechazan que estén implicados en tráfico de armas y drogas, aunque reconocen los secuestros como vía para la obtención de dinero. Fin