El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, acompañado de una delegación especial de empresarios y varios de sus ministros, ha llegado hoy a China en la que es su segunda visita oficial, y justo después de que, el mes pasado, China se desbancara a EE UU como principal socio comercial de Brasil.

Uno de los pilares del proyecto político de Lula, reducir la dependencia de Estados Unidos en el terreno económico suprimiendo la utilización del dólar como moneda de cambio en las transacciones comerciales entre Brasil y los países con los que mantiene relaciones bilaterales, va a ser planteada también al presidente chino Hu Jintao durante las negociaciones de los posibles acuerdos que firmen China y Brasil. En la actualidad, Lula ya ha conseguido prescindir de la moneda estadounidense en sus intercambios comerciales con Argentina, Uruguay y Colombia.

Este es un momento clave en las relaciones entre los dos países, y los pactos que se firmen en los próximos días podrían tener consecuencias sustanciales en el contexto politico y económico internacional. Además de haber establecido un frente común en las últimas reuniones del G-20, China y Brasil han alcanzado cotas altísimas en su comercio bilateral en lo que llevamos de año, con un volumen de transacciones de 3.200 millones de dólares, que sitúan a China en el primer lugar de entre los socios comerciales del país latinoamericano.