El primer ministro tailandés Abhisit Vejjajiva pronunció otro discurso por televisión en las primeras horas del lunes instando a los manifestantes a poner fin a sus protestas "inconstitucionales" inmediatamente y a enviar representantes para hablar con él.
El premier hizo un llamado a los manifestantes "camisas rojas" que acamparon en la Casa de Gobierno, para iniciar una negociación con su gobierno en lugar de continuar las manifestaciones "ilegales" en Bangkok.
Los próximos tres o cuatro días serán cruciales, durante los cuales la gente verá el cambio real de la situación, dijo Abhisit. El gobierno demostrará su capacidad para devolver la ley y el orden al país adoptando medidas más severas contra los manifestantes.
Estas medidas podrían causar inconvenientes a la vida de la población, por lo cual pedimos disculpas, dijo el primer ministro tailandés.
Dijo que está listo para dimitir o disolver la Cámara de Representantes si estas medidas traen paz al país.
En este último discurso televisado, el quinto que pronuncia el acosado premier de Tailandia desde esta mañana, Abhisit dijo que el objetivo de las protestas de los camisas rojas está más allá de los límites de la democracia, como lo afirman los manifestantes.
En un discurso previo por televisión pronunciado menos de dos horas antes, el premier tailandés dijo que hay planes que involucran a la policía y el ejército para implementar el decreto de emergencia sobre Bangkok. Dijo a la gente que no se preocupe, rechazando que las autoridades deben recurrir a la violencia para aplacar a los manifestantes.
La corte provincial de Pattaya emitió órdenes de arresto contra los cinco líderes principales del grupo de camisas rojas Frente Unido de la Democracia Contra la Dictadura (UDD). Uno de los líderes, Arisamun Pongruangrong, ya está bajo custodia por acusaciones de incitación a la violencia y creación de desorden en la sociedad, según el primer ministro tailandés.