Las autoridades chinas informaron ayer miércoles que presentaron una protesta formal ante Estados Unidos por las últimas observaciones de representantes de ese país sobre la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China.
"Sentimos un gran descontento y nos oponemos de forma contundente a las declaraciones", afirmó el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores del país, Ma Zhaoxu.
Ma hizo estos comentarios después de que la Casa Blanca y el Departamento de Estado publicaran el martes declaraciones en las que criticaban la política china en el Tíbet.
Robert Wood, portavoz del Departamento de Estado de EEUU, afirmó ayer que su país está "profundamente preocupado por la situación de los derechos humanos en el Tíbet" e instó a China a llevar a cabo un "diálogo sustantivo con representantes del Dalai Lama".
"La situación en el Tíbet es puramente un asunto interno de China, por lo que el gobierno y el pueblo se oponen a que cualquier país lo utilice para interferir en nuestras cuestiones nacionales", subrayó Ma.
El portavoz de la cancillería china agregó que EEUU, “sin hacer caso de la realidad”, condena de forma aleatoria a China sobre la cuestión del Tíbet con el propósito de intervenir en los asuntos internos, lo cual ha lastimado los sentimientos del pueblo chino.