España desea que a través del Año de España en China, inaugurado oficialmente el pasado 26 de febrero en Madrid, la ciudadanía china no sólo la perciba como un país turístico, sino como una sociedad abierta, desarrollada y avanzada, afirmó ayer Carlos Blasco Villa, embajador español acreditado en Beijing.
En una entrevista exclusiva con Xinhua, el embajador señaló que aunque las relaciones entre España y China han alcanzado gran fluidez y variedad temática, distan mucho de haber logrado la profundidad y riqueza deseables, posiblemente debido al desconocimiento mutuo.