El primer ministro canadiense, Stephen Harper, expresó sus condolencias al pueblo chino por el fuerte terremoto que afectó la provincia de Qinghai el miércoles por la mañana.
"De parte del gobierno y el pueblo de Canadá, expreso mis más profundas condolencias al pueblo de China en este difícil momento", señaló Harper en una declaración. "Nuestros pensamientos y rezos están con aquellos que han perdido a sus seres queridos y con aquellos que aún están desaparecidos".
Harper señaló que Canadá está lista para entregar apoyo al pueblo chino durante este tiempo de necesidad.
"Nuestros funcionarios en Beijing están contactando a las autoridades concernientes chinas para determinar si se requiere la asistencia canadiense", señaló el primer ministro.
En otra declaración, el ministro de Relaciones Exteriores canadiense, Lawrence Cannon, expresó su profundo dolor y condolencias a las familiares y amistades de quienes murieron, y le deseo una rápida recuperación a los heridos.
"Canadá está profundamente preocupada por el bienestar de aquellos afectados por el desastre", señaló Cannon, agregando que Canadá hasta ahora no ha recibido reportes de ciudadanos canadienses muertos o heridos por el movimiento telúrico.
Un terremoto de 7,1 grados de magnitud en la prefectura autónoma tibetana de Yushu, en la provincia noroccidenteal china de Qinghai el miercoles por la mañana, dejó al menos 589 muertos y a muchas otras enterradas bajo los escombros. Fin