Shanghai se convertirá este año en la primera ciudad china que ofrecerá educación obligatoria gratuita a todos los hijos de trabajadores emigrantes en edad escolar que residen en esa metrópoli oriental china, según informó el periódico "Diario del Pueblo" en su edición de hoy miércoles.

En la actualidad, un 97,3 por ciento de los 400.000 hijos de trabajadores emigrantes se han matriculado de forma gratuita en escuelas primarias y secundarias de Shanghai. Los centros a los que asisten los niños son públicos o bien escuelas privadas que han recibido el apoyo financiero del gobierno local.

Según informó el subdirector de la Comisión de Educación de Shanghai, Yin Houqing, los 10.000 niños restantes acuden en la actualidad a 22 escuelas privadas, donde sí están pagando todavía tasas de matrícula.

Esos 22 centros carecen de licencias oficiales o bien no han recibido la certificación de las autoridades sobre la seguridad de los recintos y las comidas que se sirven en ellos. Con el plan gubernamental, se destinarán fondos públicos a mejorar la calidad de la educación en esas 22 escuelas.

Si pese a todo no se alcanzan los niveles mínimos exigidos, los niños pasarán a estudiar antes de mayo en otras escuelas privadas o públicas que sí cuenten con los certificados de calidad oficiales para hacer realidad el objetivo de que todos los hijos de trabajadores emigrantes tengan acceso a una educación obligatoria gratuita de calidad.

Esta meta supone un gran desafío en muchas ciudades chinas, ya que una gran parte de las escuelas sólo admite a estudiantes cuyas familias sean residentes permanentes de esas localidades, de acuerdo con el conocido como "hukou", o sistema chino de registro de residencia familiar.

De acuerdo con Yin, el gobierno de Shanghai invirtió el año pasado 3.690 millones de yuanes (543 millones de dólares) para ayudar a que un mayor número de jóvenes en edad escolar puedan estudiar de forma gratuita en las escuelas de las ciudades donde trabajan sus padres. Fin