La capital china registró ayer domingo una fuerte nevada, la segunda del año, que ha obligado a cerrar autopistas y ha provocado atrasos en algunos vuelos y la suspensión de los servicios de autobuses. La nevada provocará una caída de las temperaturas de entre siete y ocho grados centígrados, hasta llegar a los 16 grados bajo cero, la cifra más baja desde la década de 1980.
El Buró de Administración del Tráfico de Beijing informó de que las autopistas que unen la ciudad con la vecina provincia de Hebei y la municipalidad de Tianjin tuvieron que cerrarse, aunque la autopista hacia el Aeropuerto Internacional de la Capital de Beijing permaneció abierta al tráfico. Además, 60 rutas de autobús urbano se han visto afectadas por la nieve y se han interrumpido los servicios de las 47 líneas que van desde la capital hasta las zonas rurales cercanas.