El presidente de China Hu Jintao hizo una visita a un centro de tratamiento de despercidios luego de su llegada hoy a Macao, subrayando su atención en los asuntos ambientales.
El presidente Hu llegó a Macao en un avión especial para asistir a las celebraciones por el 10° aniversario del regreso de la ciudad a la madre patria. Esta es la segunda ocasión que el presidente está en Macao.
Al reconocer que Macao enfrenta cada vez más presión en protección ambiental por la tierra limitada y la creciente población, Hu hizo una visita especial a la Planta de Incineración de Macao (MIP en inglés), que se localiza en la isla Taipa.
Desde la implementación de la vieja planta de incineración de desperdicios sólidos en 1992, Macao se ha estado enfocando en la "incineración como método primario respecto a los desperdicios sólidos y el relleno de tierra como segundo" para enfrentar los desperdicios de los hogares.
A la conclusión del trabajo de ampliación del año pasado en la MIP, la máxima capacidad diaria para el tratamiento de los desperdicios sólidos aumentó de 864 a 1.728 toneladas y se espera que cumpla el requerimiento de tratamiento de desperdicios de Macao hasta 2025.
El presidente Hu analizó con cuidado una caja de arena y un aviso, luego de una introducción acerca de la MIP y haciendo preguntas ocasionalmente.
Según el personal de la planta, el calor de desperdicios producido por la planta de incineración se puede convertir en electricidad. La MIP puede producir 21.000 kilovatios hora de electricidad cada hora, lo que suma al uso total de electricidad de 33.000 hogares.
Impresionado con la avanzada tecnología de energía producida por desperdicios, el presidente Hu Jintao dijo que espera que la planta y todo sus personal continúen con sus esfuerzos para construir una Macao que sea más amigable con el ambiente. Fin