El primer ministro de China Wen Jiabao declaró hoy aquí que el principio de "responsabilidades comunes pero diferenciadas" es el fundamento y la base de la cooperación internacional sobre el cambio climático y nunca debe ser comprometido.
En su discurso pronunciado en la sesión inaugural de la última parte de la cumbre en la conferencia de la ONU sobre el cambio climático, Wen señaló que los países desarrollados aportan 80 por ciento del total de emisiones de dióxido de carbono global desde que inició la revolución industrial hace 200 años.
"Si todos coincidimos en que las emisiones de dióxido de carbono son la causa directa del cambio climático, entonces es claro quién debe asumir la responsabilidad primaria", dijo el premier chino.
Los países en desarrollo apenas empezaron su industrialización hace unas cuantas décadas y una gran parte de su población vive actualmente en la pobreza absoluta, comentó Wen, "es totalmente injustificado pedirles que cumplan objetivos de reducción de emisiones más allá de sus correspondientes obligaciones y capacidades sin considerar las responsabilidad históricas, las emisiones per cápita y los diferentes niveles de desarrollo".
Los países desarrollados, que ya llevan una vida próspera, aún mantienen un nivel de emisiones per cápita muy superior al de los países en desarrollo, y la mayor parte de sus emisiones se atribuyen al consumo, explicó Wen.
En comparación, las emisiones de los países en desarrollo son primordialmente emisiones de sobrevivencia y emisiones de transferencia internacional, añadió el premier chino.
"Actualmente, 2.400 millones de personas en el mundo aún dependen del carbón, carbón de leña y troncos como principales fuentes de combustible, y 1.600 millones de personas no tienen acceso a la electricidad" por lo que cualquier acción sobre el cambio climático debe ser tomada dentro del marco del desarrollo sustentable y por ningún medio deben comprometerse los esfuerzos de los países en desarrollo para salir de la pobreza y superar el retraso, insistió.
Wen exhortó a los países desarrollados a tomar la delantera para hacer profundas reducciones de emisiones cuantificables y proporcionar apoyo financiero y tecnológico a los países en desarrollo debido a que "esta es una ineludible responsabilidad moral así como una obligación legal que deben cumplir".
Los países en desarrollo deben, con el apoyo financiero y tecnológico de los países desarrollados, hacer lo que puedan para reducir las emisiones de gas invernadero y adaptarse al cambio climático con base en sus condiciones nacionales, declaró Wen.