Más de 10.000 alumnos que se vieron obligados a proseguir sus estudios lejos de sus hogares tras el devastador temblor que sacudió la provincia suroccidental china de Sichuan en mayo 2008, volverán a las escuelas de su localidad, el distrito de Wenchuan, epicentro del seísmo, para el próximo semestre escolar, han informado hoy domingo fuentes locales.
De acuerdo con Hu Zheng'an, director del buró de educación de Wenchuan, el 95 por ciento del proceso de reconstrucción de los centros educativos del mencionado distrito se completará antes del primero de septiembre, día en que se inicia el semestre escolar otoñal.
Tras el desastre, los alumnos de cuatro escuelas primarias continuaron recibiendo clases en las viviendas prefabricadas de Wenchuan, mientras que los restantes 16.000 estudiantes del distrito se trasladaron a otras ciudades o provincias.
El terremoto, de 8,0 grados en la escala de Richter, dejó un saldo de más de 87.000 muertos y desaparecidos y millones de personas sin hogar.
Con el fin de asegurar la educación de los niños del distrito, Wenchuan puso en marcha un nuevo proyecto de construcción de escuelas con un presupuesto de más de 2.200 millones de yuanes. La escuela primaria Sanjiang, una de las primeras en iniciar la reconstrucción, reanudará sus clases para todos sus 360 alumnos el próximo 12 de mayo, el primer aniversario del terremoto, dijo Hu.
En la actualidad, más de 300 obreros están trabajando día y noche para reedificar una escuela primaria en el pueblo de Yanmen.
"Habitualmente, construir un edificio de más de 10.000 metros cuadrados lleva cerca de un año. Sin embargo, tenemos previsto terminar esta escuela en un plazo de seis meses para que los estudiantes puedan regresar lo antes posible", indicó Huang Guangcan, jefe de la obra del centro educativo de Yanmen. "Tenemos que reforzar la supervisión para garantizar la calidad de la construcción", afirmó.