China ha reforzado el control de sus fronteras en el Tíbet ante la celebración de las "Dos Sesiones" anuales y las posibles actividades de sabotaje de la camarilla del Dalai Lama, informaron hoy lunes fuentes policiales.

"Hemos hecho los despliegues oportunos y hemos reforzado los controles tanto en los puertos fronterizos como en las áreas y pasos clave a lo largo de la frontera en el Tíbet", explicó en Beijing el comisario político del departamento de control fronterizo del Ministerio de Seguridad Pública, Fu Hongyu.

"Tomaremos medidas enérgicas contra las actividades criminales en la zona fronteriza del Tíbet que supongan una amenaza para la soberanía y el gobierno de China", dijo Fu, también diputado asistido a la segunda sesión de la XI Asamblea Popular Nacional (APN, parlamento chino) que se celebra en Beijing.

"Haremos todo lo posible por mantener la seguridad y la estabilidad de la frontera y de las áreas costeras", afirmó el diputado.

Tíbet celebrará el 50º aniversario de la abolición de la esclavitud y del régimen teocrático del Dalai Lama el próximo 28 de marzo. La camarilla del Dalai Lama provocó los disturbios en la capital tibetana, Lhasa, en marzo del año pasado.

El presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular de la región autónoma del Tíbet, Legqog, dijo el pasado domingo que la camarilla del Dalai Lama había incrementado sus "actividades secesionistas y de sabotaje" en el Tíbet este año.

"Han intentado crear problemas consipirando con los que están dentro del Tíbet o incluso enviando a su propia gente", explicó Legqog.

Tíbet, una región de meseta en el suroeste de China, comparte fronteras con Myanmar, India, Bhutan y Nepal.