El ministro chino de Recursos Humanos y Seguridad Social, Yin Weimin, advirtió hoy martes de que la situación del empleo en China sigue siendo "grave", aunque aseguró que las medidas tomadas por el gobierno para promover la inserción laboral ya han dado "resultados iniciales".
En una rueda de prensa paralela a la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional (APN, máximo órgano legislativo), Yin recordó que el número de puestos de trabajo ofrecidos por las empresas ha caído de forma brusca, un gran número de trabajadores migrantes han perdido su empleo y la industria de mano de obra intensiva, una de las principales víctimas de la crisis financiera global, se ha deprimido.
Ante esta situación, el gobierno chino ha tomado una serie de medidas que ya han tenido "efectos iniciales", según el ministro.
En los primeros dos meses de este año, el número de nuevos puestos de trabajo en las ciudades chinas ha remontado, explicó Yin.
El número de nuevos trabajadores se situó en los 690.000 en enero y los 930.000 en febrero. El pasado mes de noviembre, esta cifra fue de 550.000, mientras que los nuevos empleos se redujeron a 380.000 en diciembre del 2008, informó el ministro.
China registró en febrero el primer aumento en el número de empleos ofrecidos por las empresas después de una caída de cuatro meses consecutivos desde octubre del año pasado, añadió Yin.
"Se trata de un incremento moderado de sólo uno por ciento, pero es una buena noticia", indicó. "Debemos seguir observando el desarrollo económico general (para sacar conclusiones)".