contradicciones originadas por los recursos y el medio ambiente. Las metas establecidas a principios de 2006 para economizar energía y disminuir emisiones y descargas contaminantes no se han podido cumplir por las siguientes causas principales: la lentitud en el desarrollo de la reestructuración sectorial de la economía, con una proporción relativamente baja del sector de servicios, crecimiento continuo y excesivo de la industria pesada, en particular de algunas ramas de alto consumo energético y grave contaminación, y permanencia en el mercado de muchas capacidades obsoletas que debían haberse eliminado; la imperfección y la incomplementariedad en las pertinentes leyes, reglamentos, normas y sistemas de administración, y la insuficiente inversión en ahorro de energía y reducción de emisiones y descargas contaminantes y la ejecución incompleta de las políticas y medidas fiscales, tributarias, tarifarias y bancarias en apoyo de estas acciones; la falta de un fuerte impulso de muchas empresas a su transformación técnica en favor del ahorro energético y la protección medioambiental, y la necesidad de determinado tiempo para la finalización y el rendimiento de ciertos proyectos concebidos en el mismo sentido; la aplicación deficiente del rigor de la ley, los bajos costes exigidos por su violación y la constante presencia de infracciones como el despilfarro de recursos y el deterioro del medio ambiente a pesar de prohibición repetida; la postergación, en ciertas zonas, de una mayor concienciación sobre la importancia y la urgencia de economizar energía y proteger el medio ambiente, dada la atribución de más importancia al crecimiento económico que a la protección medioambiental. Por eso, en 2007 no dejarán de ser bastante arduas las tareas de ahorrar energía y aminorar emisiones y descargas contaminantes. Pese a cierta mejora de la situación presentada en materia de carbón, electricidad, petróleo y transporte, subsiste la presión de carácter regional, temporal y estructural de la demanda sobre la oferta.

En cuarto lugar, la persistente prominencia de los problemas sociales, que hace ardua la tarea de promover la armonía social. La situación del empleo sigue siendo severa, ya que coexisten el exceso del total de las fuerzas laborales y su carencia de carácter estructural, los estudiantes universitarios encuentran aumentada la presión del empleo y todavía es un problema relevante la recolocación para los trabajadores desplazados de sus puestos y los desempleados, especialmente las mujeres de cuarenta o más años y los hombres con los cincuenta ya cumplidos, así como para las familias sin ningún empleo. La seguridad social tiene una cobertura reducida. Las masas se quejan fuertemente por el difícil y costoso acceso a la asistencia médica y a la educación, permanecen de relieve cuestiones como las relacionadas con la seguridad