Dragones dorados formados por fuegos artificiales se elevaron sobre la Plaza de Tian'anmen casi media hora después de que empezara hoy la gala nocturna por el Día Nacional de China en esta capital.

Los vívidos dragones de fuegos artificiales volaron sobre 60.000 personas que gritaban jubilosas y bailaban en la plaza.

La multitud lanzó una exclamación de sorpresa y admiración. Muchos de ellos eran residentes de distritos de Beijing. Habían practicado la danza durante cerca de un mes.

"Tomamos clases una o dos veces cada semana en el último mes. El entrenamiento fue organizado por nuestro comité de residentes del vecindario", dijo una mujer de unos 50 años de edad vestida con un traje femenino tradicional tibetano. Su vecindario en el distrito de Haidian en el noroeste de Beijing ofreció un espectáculo de danza tibetana.

En la pantalla de 2.000 metros cuadrados en el extremo sur de la plaza, los fuegos artificiales formaron una serie de "películas" en las que el desierto se convertía en oasis y burbujas primaverales estallaban en el brillo del sol.

Poco después de que desaparecieron del cielo oscuro los dragones de fuegos artificiales, cerca de una docena de "dragones" de tela aparecieron en tierra, llevados por danzantes acompañados por más de 120 "leones". La tradicional danza del dragón y del león destacó el tema de esta parte del espectáculo, el despegue de China.