Explosión de la demanda

El año pasado, se estimó que los solicitantes chinos bajo la visa de inversionista EB-5 representaron el 85 por ciento de los fondos generados por el programa. Además, por primera vez en sus 24 años de historia, se agotó la cuota anual de 10.000 visas.

En contraste, en 2006, sólo 16 visas de inversionistas fueron adquiridas por inmigrantes chinos, a quienes se requirió invertir por lo menos $500.000 dólares en un negocio estadounidense, de acuerdo al Departamento de Estado.

“Con la explosión de la demanda y una recuperación de su economía, Estados Unidos posiblemente levante el umbral si renueva el programa en septiembre” señaló en una evaluación reciente el Grupo de Consultoría Mundial Henry, una agencia de inmigración china.

Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda continúan siendo los destinos de inmigración más populares para todos los chinos, según el reporte anual de 2014 sobre la migración china emitido por el Centro de China y la Globalización, un think tank chino.

El reporte señaló que un estimado de 9.3 millones de residentes chinos habían emigrado para finales de 2013. No dio el número para aquellos que lo hicieron con visas de inversionistas.

Además, algunos países del sur de Europa que pasan por tiempos económicos difíciles han estado aceptando números crecientes de inmigrantes chinos bajo varios programas de visas para inversionistas.

El Reino Unido, donde los chinos se convirtieron en el mayor grupo de inmigrantes en 2012, duplicaron la inversión mínima requería para la visa de inversionista Tier 1 a 2 millones de libras (3.03 millones de dólares) el año pasado.