¿Qué hacen 8.9 millones de chinos (la población de Wuhan) que trabajan en el mismo horario de 9 a 5, los cinco días de la semana? Todos salen... al mismo tiempo. Durante los fines de semana, puedes olvidarte de recorridos placenteros a través de la ciudad o esperar tener un asiento en el autobús. Te puedes olvidar de pasear por las anchas avenidas; las avenidas siguen siendo anchas, pero ahora están atestadas de un mar de cabezas de cabello negro brillante menéandose (y de paraguas). Y recuerden: van de la mano o envueltos en los brazos del otro, añadiendo un reto adicional a navegar por el tráfico peatonal sin romper un grupo físicamente enlazado. Parece que nadie se queda en casa en Wuhan los fines de semana; todos están en las calles, en los centros comerciales, autobuses, en el ferry. Si el tráfico es horrible durante la semana, es un asesinato pleno el fin de semana. Cualquier plan para salir empieza a las 7 de la mañana o más temprano o corres el riesgo de no alcanzar a realizar tus planes. Eso significa que no llegaría al campus antes de que oscurezca... ¡Es mi culpa por violar las reglas!.