
La opinión de los expertos
Lin Hua, experta en asuntos de mujeres, forma parte del jurado del concurso de Spicy Moms y afirma estar impresionada por el hecho de que algunas madres fuertes que reivindican el nuevo modelo asistieron a la competencia en compañía de sus suegras.
“La fricción entre nueras y suegras parece inevitable si viven bajo el mismo techo”, subrayó y añadió que hoy en día es más fácil manejar esta relación, porque la mayoría de las parejas no viven con sus padres. Las esposas no deben esperar que sus suegras las traten como sus madres biológicas y deben ser muy cuidadosas, respetuosas y corteses en el trato que le dispensan.
Para ella, la madre fuerte es una experta en solucionar los conflictos y mantener el equilibrio entre la vida laboral y familiar.
En los años 1980 y 1990, muchas madres chinas se sintieron culpables por dedicar demasiado tiempo a su trabajo y los discursos de aceptación de la mayoría de los modelos femeninos de trabajo estaban a su vez llenos de disculpas a su familia y peticiones de perdón por pasar tanto tiempo en el trabajo.
“Algunas mujeres excelentes preferían sacrificar su carrera por su marido y sus hijos. Pero hoy día muchas no consideran que la familia es todo el significado o el propósito de su vida”, sostuvo Lin.
Confucioen las mujeres
En la antigua China, las mujeres fueron educadas en la ética de Confucio, de las “tres obediencias y cuatro virtudes”. Las tres obediencias exigen a las mujeres a obedecer a su padre como hija, a su marido como esposa y a su hijo como viuda. Las cuatros virtudes son la moral, el atractivo físico, el lenguaje correcto y la excelencia en la costura.
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