Sin duda alguna, las relaciones económicas bilaterales entre China y Cuba son mutuamente beneficiosas. China se beneficia de la biotecnología avanzada de Cuba y sus avances en oftalmología, así como la exportación a Cuba y la importación de níquel y otras materias primas.

El momento elegido para la visita de Xi es un momento excelente; la nación caribeña acaba de celebrar la convención de su VI Congreso del Partido, en la que Raúl Castro prometió llevar a cabo varias reformas, que se esperan que servirán para transformar la vida económica y política en el país.

La visita de Xi podría alimentar las especulaciones sobre las posibilidades de que China proporcione algunas lecciones a Cuba sobre su experiencia positiva con la política de reforma y apertura china. Durante muchos años, las perspectivas económicas de Cuba han sido bastante oscuras. Ahora, la opinión pública está cambiando, y algunos analistas predicen que Cuba finalmente se convertirá en "una China en el Caribe," que significaría una aplicación de las reformas de mercado bajo el estricto liderazgo comunista y un régimen socialista. Los cubanos, sin embargo, no aceptan esta opinión, insistiendo en que Cuba seguirá su propia vía de desarrollo.

Las naciones de todo el mundo tienen que aprender unas de otras, pero no deben copiar ciegamente los éxitos de los modelos económicos de otros estados. China ha establecido un mercado económoco con características propias, pero Cuba todavía no ha declarado que vaya a construir un sistema de mercado. Se ha limitado a indicar que sólo se llevarán a cabo las reformas orientadas al mercado con características cubanas.

El desarrollo económico de China es notable. Socialmente, sin embargo, China se enfrenta a una tarea de enormes proporciones. El desarrollo económico de Cuba, con el bloqueo de Estados Unidos, no es muy satisfactorio, pero su progreso social ha sido elogiado por muchas personas de todo el mundo. Hace unos años, en una conferencia en el Reino Unido, escuché a un funcionario cubano decir: "En Cuba, es más fácil hacer un trasplante de corazón que comprar una aspirina, y es más fácil obtener un título universitario que conseguir un bolígrafo".

En cualquier caso, Cuba es una nación admirable que ha persistido en mantener el socialismo frente a un entorno externo muy duro, y el apoyo moral y la ayuda económica de China contribuirán, sin duda alguna, a la siguiente fase de desarrollo de Cuba tras el VI Congreso del Partido Comunista Cubano.

Jiang Shixue es columnista de China.org.cn.

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