Ubicada en Huangshi, noreste de la provincia de Hubei, la mina de hierro ‘Daye’ cuenta con más de mil setecientos años de historia. La milenaria explotación de esta mina ha creado un enorme boquete de más de 1,8 kilómetros cuadrados.

Hace algunos años, la mina estuvo a punto de ser transformada en un relleno sanitario. Afortunadamente, los planeadores de la ciudad decidieron preservar la historia: el área se convirtió en el primer parque nacional de minería.

Histórico sitio de minería

Aproximadamente a 65 kilómetros de Wuhan, capital de la provincia de Hubei, Huangshi solía ser uno de los centros más importantes de la producción de bronce en China. La extracción de cobre en la región data de los tiempos de la dinastía Yin, cerca de mil quinientos años antes de nuestra era. Documentos de valor histórico ubican el inicio de la extracción de hierro alrededor del año 226 de nuestra era.

En el año de 1889, durante el reinado del emperador Guangxu de la dinastía Wing (1644-1911), Zhang Zhidong fue nombrado gobernador general de Hunan y Hubei. Al promover la generación de industria pesada, el gobernante fundó la planta de aceros Hanyang, la mina de hierro Daye, la mina de carbón Pingxiang y, en 1890, el arsenal de Hubei.

A partir de entonces, la mina de Daye se convirtió en una importante base de extracción para las industrias chinas del acero y el hierro. Más de 130 millones de toneladas de mineral hierro, 320 mil toneladas de cobre y 360 mil toneladas de roca han sido extraídas de la mina.

Desgraciadamente, después de décadas y décadas de extracción continua, la estructura geológica y el ecosistema de la mina han resultado severamente dañados. Además, derrumbes frecuentes y otros desastres geológicos representaban amenazas serias para el sitio. Cuando las actividades de minería fueron detenidas en el foso este en el 2000, el asunto de qué hacer con el foso se convirtió en un dolor de cabeza para el gobierno local.

La crisis del relleno

En los últimos años, con el progreso urbano, la población de Wuhan creció rápidamente; como consecuencia de ello, la cantidad de basura producida también se incrementó. Algunos expertos en administración de basura propusieron convertir la mina de Huangshi en un relleno sanitario. El argumento se sustentaba en la idea de que el mismo tren que acarreaba el hierro desde la mina a Wuhan podría llevar los desperdicios sólidos de vuelta a la mina. De esta forma, arguían los defensores de este singular proyecto, se matarían dos pájaros de un tiro: si la mina recibía dos millones de toneladas de desperdicios sólidos por año, tardaría alrededor de cien años en rellenarse. De esta forma, Wuhan encontraría una solución a su problema de administración de los desechos sólidos y, al mismo tiempo, rellenaría el gigantesco foso generado por la mina reduciendo así el desastre geológico en el área.

No obstante lo ingenioso de la propuesta, los mineros de la región se le opusieron tajantemente. Para ellos, la mina no sólo era el lugar en el que habían trabajado toda su vida; el inmenso foso significaba un milagro de la técnica humana desarrollado por miles de mineros a través de cientos de años. El concepto de herencia industrial inspiró a los trabajadores de la mina de hierro Daye. Si los antiguos centros de producción de la revolución industrial son transformados en museos y parques en los países occidentales ¿por qué habría que convertir la mina Daye en un relleno sanitario?

La oportunidad de realizar el sueño de estos trabajadores vino cuando en el año 2005 el Ministerio de Tierra y Recursos (MTR) lanzó la convocatoria nacional de registro para sitios históricos de minería. El 16 de junio de 2005, la candidatura del Parque Nacional de Mineria Huangshi pasó las revisiones del nivel provincial. En los siguientes meses, se convertiría en el primer parque nacional de minería de la provincia de Hubei tras haber sido nominada por el MTR, el Ministerio de Finanzas, el Buró Nacional de Turismo y la Administración Estatal de Protección Ambiental.

Después de aquel día, la planeación y construcción del parque en la mina de hierro Daye comenzaron inmediatamente.

Obstáculos financieros

Sin embargo, no fue fácil para la mina sustentar el planeamiento con ingresos que se reducían día con día. En el pasado los ingresos de la mina se generaban a partir de la venta del mineral de hierro (una de las materias primas utilizadas en la fundición de acero). Más cuando el foso este fue cerrado, la capacidad anual de producción se redujo significativamente de 5 millones de toneladas a cerca de un millón.

Así, el financiamiento de la planeación del parque se convirtió en un gran problema. Afortunadamente, el MTR y el buró de turismo de Hubei pusieron el dinero para que arrancara el primer museo de minería de hierro en febrero de 2006. En ese mismo año, un jardín de exhibición industrial fue también establecido. Después de dos años de construcción, el parque de minería de hierro con dos áreas para visitantes, una en el foso y la otra en el sitio de recuperación ecológica, abrieron sus puertas el 22 de abril de 2007.

Con sus características tan únicas, el parque atrajo a cientos de turistas. Para el final del año 2007, había recibido un total de 80 mil visitantes e ingresado a sus arcas varios millones de yuanes.

Protección ambiental

En el Parque Nacional de Minería Huangshi se exhibe equipo ‘retirado’: máquinas de excavación, trenes de transporte de materiales, entre otros. Algunas partes de maquinaria ‘retirada’ han sido utilizadas para elaborar grandes estatuas.

Extrañamente, el inmenso foso de la mina ya no es tan bullicioso como antes. Ya sólo se ven dos o tres camioncitos allá, en el fondo de la mina. Vistos desde bien arriba, parecen pequeños escarabajitos que lentamente vuelven a casa.

“Para proteger el sitio, toda labor de minería ha sido prácticamente detenida, con excepción de algunas pequeñas actividades”, comentó Zhang Zhihe, un oficial de buró de turismo local.

El sitio de recuperación ecológica del parque cubre un área de casi 4 kilómetros cuadrados. Anteriormente era el sitio donde las rocas que eran extraídas se apilaban. La presencia de las rocas por tan largo tiempo hizo casi imposible el crecimiento de vegetación. Sin embargo, después de varios experimentos, la plantación de árboles resistentes a la sequía resultó ser un método eficiente para combatir el deterioro ambiental en el sitio de la mina. De los 4 kilómetros casi 3,7 han sido cubiertos por abundante follaje.