La calle Xiushui, en Beijing, fue una vez un modelo para el éxito de los negocios comerciales independientes, no gubernamentales, en China. Sin embargo, como el país ha incrementado sus esfuerzos para proteger los Derechos de Propiedad Intelectual (DPI), esa arteria, que ha estimuló fundamentalmente las ventas de productos de marcas extranjeras, sufrió un contratiempo.

Actualmente, cuando China está enfrentando duramente las violaciones de los DPI, Xiushui ha tenido que pensar en una nueva forma de mantener su prosperidad.

En 1982, algunos vendedores callejeros comenzaron a vender ropas y pequeños artículos de uso diario en esa arteria. No obstante, no fue hasta 1995 que una gran cantidad de productos falsos comenzaron a dominar el mercado. Por ese entonces, empresarios provenientes de otros países se concentraron en Xiushui para comprar los productos falsificados.

El 7 de enero de 2005, la vieja calle fue cerrada por renovación. Dos meses después, el 18 de marzo, reabrieron los negocios establecidos en ella. Sin embargo, continuó la venta de productos falsificados y tal práctica terminó en un pleito judicial. El 18 de abril de 2006, cinco famosos fabricantes internacionales demandaron a los vendedores de Xiushui.

El Alto Tribunal Municipal del Pueblo de Beijing dictaminó que los comerciantes habían violado los derechos de las marcas registradas de compañías internacionales y ordenó a los infractores y a la Compañía de la Calle Xiushui de Beijing, pagar 20.000 yuanes (unos 2.590 dólares) en compensación a cada uno de los cinco demandantes. Luego, todos los que vendieron falsificaciones tuvieron que cerrar sus negocios.

Fue un acontecimiento decisivo para la arteria comercial. Desde entonces la Compañía de la Calle Xiushui de Beijing y sus vendedores decidieron no comercializar nunca más productos falsificados. El 26 de abril de 2006, unos 1.000 comerciantes del lugar juraron en público que a partir de ese momento ellos dirían “no” a los productos falsos y comenzarían a vender productos nacionales.

Pronto seis famosas marcas domésticas, entre ellas Tongrentang, Quanjude, y Ruifuxiang, se establecerán en la calle Xiushui. Ahora, comer pato laqueado y comprar en esta zona se ha convertido en un atractivo para los visitantes extranjeros.

Actualmente, las artesanías tradicionales chinas, productos de seda, perlas, hojas de té, porcelana, productos de marcas chinas, entre otros, constituyen los principales artículos que se venden en Xiushui. Cuando visitan la calle, los clientes son atraídos por los artículos finos de arte, ropa de seda y deliciosos patos laqueados que se preparan allí. Cosas como esas representan una oportunidad para que los visitantes vean la auténtica cultura china. 

(05/05/2007, spanish.china.org.cn)