El conjunto de las construcciones de Macao pasó a formar parte de la lista de Patrimonio de la Humanidad el 15 de julio de 2005, bajo la denominación de "Centro histórico de Macao", por acuerdo de la XXIX Asamblea Mundial.
Macao está situada en el suroeste de la desembocadura del río de la Perla y tiene un área de 22,5 kilómetros cuadrados y una población de más de 400.000 habitantes. Es uno de los lugares más poblados del mundo y una de las ciudades con el nivel de vida más alto de Asia. La mayoría de sus habitantes son chinos, y los portugueses y extranjeros representan apenas un 5 por ciento de sus habitantes.
Macao es considerada una metrópolis internacional, una urbe donde han coexistido la cultura china y la occidental durante varios siglos.
El "Centro histórico de Macao" está constituido por el viejo casco, que conforma su núcleo, y que está conectado a varias plazas cercanas y a más de veinte construcciones históricas. El viejo casco, donde han residido en comunidad extranjeros y chinos hasta hoy, mantiene los principales rasgos de su fisonomía original.
Hay varias construcciones que son únicos en Macao con respecto al resto de China en cuanto a antigüedad. Destacan las catedrales católicas, las ruinas eclesiásticas, el conjunto de batería occidental, el monasterio, el teatro occidental, el faro moderno, el hospital occidental y el periódico en lengua extranjera. Estas edificaciones reúnen los rasgos típicos de un puerto marítimo y de una zona tradicional.
Tras varios siglos, la ciudad mantiene su estructura original, sin que haya que lamentar que el urbanismo moderno haya vulnerado sus raíces.
En 1999, China recuperó el ejercicio de la soberanía hacia Macao, que desde entonces es una región administrativa especial que cuenta con una gran autonomía con respecto al gobierno central. Gracias a la política de "un país, dos sistemas", el territorio mantiene las características de su sociedad y su sistema económico.
(29/08/2006, Agencia de Xinhua)