La prensa digital de Uruguay lamentó este martes el fallecimiento del ex futbolista Pedro Virgilio Rocha, a los 70 años, quien brilló con su técnica y es el único uruguayo que disputó cuatro mundiales.
Rocha murió el lunes a la noche en Sao Paulo, Brasil, donde residía desde que finalizó su carrera, aquejado de una atrofia en el mesencéfalo, confirmó la web oficial de Peñarol, club uruguayo donde fue ídolo.
En un comunicado, Peñarol señaló que el volante ofensivo apodado "el verdugo" "seguirá viviendo eternamente en la memoria y en los corazones de todos los carboneros".
"Pedro Rocha, el exquisito", tituló la edición del diario "El País", que lo recordó como "poseedor de una técnica depurada y una pegada soberbia que le permitía colocar la pelota en el lateral de la red en los penales".
En tanto, "El Observador" resaltó que "se fue Pedro Rocha, el de la 'pegada diabólica'". El periódico cita al periodista deportivo y escritor Franklin Morales quien lo definió como "un jugador de una habilidad especial para amasar la pelota; esquivaba con zancada larga y dejaba atrás a los marcadores".
"Además, tenía un remate diabólico, de una gran precisión" y "era frío, cerebral, no se desgastaba en la marca. No era un jugador de carácter, abstraído de la lucha física en la cancha, él se dedicaba a crear jugadas".
Rocha sufría hace cinco años una enfermedad degenerativa que afectaba su habla y motricidad. Nació en la ciudad de Salto, en el norte de Uruguay, el 3 de diciembre de 1942. Jugó cuatro mundiales consecutivos con la selección uruguaya (1962, 1966, 1970 y 1974) y ganó el Campeonato Sudamericano de 1967.
Rocha marcó su carrera con sus pasajes por Peñarol (1959-1970) y el brasileño Sao Paulo (1970-1977).
Con Peñarol ganó tres veces la Copa Libertadores (1960, 1961, 1966) y dos copas Intercontinental (1961 y 1966). En Sao Paulo se adjudicó dos campeonatos paulistas y uno brasileño. También pasó por los brasileños Coritiba, Palmeiras, Bangu y Monterrey de México, donde finalizó su carrera en 1980. Fi