El futbolista argentino Martín Palermo afirmó hoy que es "impagable" jugar un Mundial con el seleccionado nacional y haber convertido un gol en la victoria 2-0 sobre Grecia por el cierre del Grupo B de la Copa que se disputa en Sudáfrica. El delantero de Boca Juniorsjugó los últimos diez minutos en el estadio "Peter Mokaba" de Polokwane, donde anotó el segundo tanto con un derechazo tras un rebote que dio el portero europeo a partir de un remate de Lionel Messi. Emocionado hasta las lágrimas, Palermo dijo al canal Telefé, a cargo de la televisación del Mundial para la Argentina, que ahora hay que ir "paso a paso y llegar a la final",el objetivo del plantel. "Con estos diez minutos que Diego me dio me llegó la pelota y por suerte pude hacer el gol. Esto es impagable: tener la camiseta de mi país y jugar un Mundial. Las sensaciones que tenés cuando estás adentro de la cancha, cuando se escucha el himno, es inolvidable", describió. Palermo, de 36 años, es el máximo anotador en la historia de Boca y fue decisivo en la clasificación del seleccionado para la Copa del Mundo con el agónico gol que convirtió a los 92 minutos ante Perú en lapenúltima fecha de las Eliminatorias en Buenos Aires, para darle el triunfo 2-1. "Somos 23 jugadores, no hay titulares ni suplentes, somos un grupo que pelea por el mismo objetivo", indicó el artillero, quien hoy tuvo el apoyo de su familia en las graderías. Allí estuvieron, por primera vez en el Mundial, su madre, su hermano y su hijo Ryduan, junto a los familiares de Maradona como las dos hijas, laex esposay el nieto. "Justo llegaron para este partido, parece mentira, vinieron hoy y regalarles este gol es maravilloso", expresó el atacante luego de la victoria que le dio a Argentina el primer puesto en el Grupo B con tres éxitos en igual cantidad de presentaciones. Además, resaltó la"mentalidad ganadora que transmite Diego", y concluyó: "Esto es increíble, es algo que no viví". El combinado albiceleste enfrentará ahora en octavos de final a México, segundo del Grupo A detrás de Uruguay, el domingo próximo en el estadio "Soccer City" de Johannesburgo. De esta forma, reeditará el cruce que se dio en la misma instancia en Alemania 2006, cuando los sudamericanos se impusieron 2-1 con aquel gol de Maximiliano Rodríguez en el tiempo extra, aunque en cuartos quedaron eliminados en tanda de penaltis con el seleccionado local. Fin