La selección brasileña de fútbol concluyó hoy su preparación para el debut en la Copa del Mundo contra la República Popular Democrática de Corea, mañana martes, con una práctica de reconocimiento en el estadio Ellis Park de Johannesburgo.
Como la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) determina que el entrenamiento final, en víspera de un partido, sea abierto, la prensa pudo asistir este lunes a las prácticas, tras un fin de semana de entrenamientos a puertas cerradas.
Los jugadores de Brasil realizaron ejercicios físicos y luego participaron del tradicional juego recreativo en una cancha bien conocida por la mayoría de ellos, ya que fue allí que conquistaron el bicampeonato de la Copa Confederaciones hace un año.
El entrenador brasileño "Dunga" conformó dos equipos, comandados, respectivamente, por Kaká y Robinho. El conjunto capitaneado por delantero del brasileño Santos goleó a los del media punta del Real Madrid, por 8-4.
El atacante suplente Grafite destacó al anotar cuatro dianas. En el final de la práctica, los jugadores entrenaron disparos a gol desde la entrada del área y Luis Fabiano, Michel Bastos, Elano y Kaká aprovecharon para cobrar penales.
El portero titular Julio César participó de todo el entrenamiento, confirmando su total recuperación de unos dolores en la lumbar que le mantuvieron de baja en el amistoso ante Tanzania y sin entrenarse con los compañeros hasta el jueves pasado.
Brasil y la República Popular Democrática de Corea se enfrentarán mañana en estadio Ellis Park de Johannesburgo, a las 20:30 hora local (17:30 GMT) bajo una temperatura que, según los pronósticos, podrá llegar a dos grados negativos. Fin