Tanto antes como después de la Revolución de 1911, debido a las guerras, el arte de las estampas de Año Nuevo se detuvo y se fue enfriando su desarrollo. En esta época aparecen las típicas tarjetas ‘Laoyue fenpai’ de Shanghai, con un carácter único.
Durante la Guerra Sino-japonesa, las zonas liberadas publicaban numerosas tarjetas para colgar, con temas populares y sobre la lucha contra los japoneses y el arduo trabajo.
Tras la fundación de la República Popular, el arte de las estampas de Año Nuevo tomó impulso, en el diseño centrado en la herencia recibida y combinado con el desarrollo de lo nuevo. Las ilustraciones y estampas reflejaban la nueva moralidad, las nuevas ideas, la nueva vida.
Desde hace mil años, este arte popular conservado de generación en generación, de padres a hijos, ha generado una atmósfera prolífica para la impresión de estampas, con lugares de producción repartidos por toda China. Son todos centros productivos de este arte muy famosos, que ya contaban con formas de producción en este ámbito en época de los Emperadores Yongzheng y Qianlong, trabajando las estampas con líneas concisas y colores brillantes.
Con la reforma y apertura llegan nuevos temas, con personajes encantadores, llenos de vitalidad, muy ornamentadas y con valor de colección.
|