El presidente estadounidense George W. Bush sostuvo hoy una conversación con un alto líder chiíta iraquí en la Casa Blanca, en medio de esfuerzos para tratar de ajustar la tambaleante estrategia en Irak.
Bush dijo que tuvo "una conversación muy constructiva" con Abdel Aziz al-Hakim, jefe del Supremo Consejo de la Revolución Islámica en Irak (SCIRI).
Bush dijo que conversaron acerca de "la necesidad de dar mayor capacidad al gobierno de Irak tan pronto como sea posible" para que el gobierno iraquí pueda hacer lo que desea su pueblo para proteger al país contra extremistas.
Bush reafirmó además su apoyo al esforzado primer ministro iraquí Nouri al-Maliki.
Por su parte, Hakim dijo que él se opone a cualquier esfuerzo regional o internacional para resolver los problemas de Irak. "Irak debe estar en posición de resolver los problemas de Irak", dijo.
Hoy más temprano, la secretaria norteamericana de Estado Condoleezza Rica dijo que sostuvo pláticas "francas y transparentes" con el funcionario iraquí.
El asesor estadounidense de seguridad nacional Stephen Hadley ha dicho que Bush hará "cambios importantes" a la política para Irak después de estudiar las recomendaciones del Grupo de Estudio para Irak, el cual entregará su reporte el próximo miércoles.
(05/12/2006, CIIC-Agencia de Xinhua)