China refutó hoy la crítica del Vaticano a la ordenación china de un obispo adjunto y dijo que la acusación es "irrazonable".

La Asociación Católica Patriótica de China ordenó el jueves pasado a Wang Renlei como vicario general de la diócesis de Xuzhou en la provincia de Jiangsu, oriente de China.

Un vocero de la Administración Estatal de Asuntos Religiosos de China dijo que China y el Vaticano no tienen ninguna relación oficial. Las dos partes no han alcanzado ningún entendimiento tácito ni acuerdos sobre la ordenación de obispos y el Vaticano nunca ha reconocido al Colegio Chino de Obispos Católicos.

Bajo tales circunstancias, dijo el vocero, China, como fue solicitado por la Iglesia Católica China, informó al Vaticano por adelantado sobre la selección y ordenación, "lo cual mostró su gran sinceridad".

"Debido al status quo de las relaciones China-Vaticano y al hecho de que el Colegio Chino de Obispos Católicos realizó evaluaciones y la diócesis de Xuzhou concluyó la selección y los preparativos necesarios para la ordenación, la solicitud del Vaticano de que se detuviera y aplazara la ordenación es irrazonable", dijo el vocero.

"Su acusación después de la ordenación también carece de sentido", dijo el vocero.

(04/12/2006, Agencia de Xinhua)