La muerte de otros siete mineros, esta vez en el suroeste del país, eleva el número de fallecidos en los últimos tres días en las minas de carbón chinas a 85.
Once mineros que eliminaban impurezas de un conjunto de minerales apilados fueron enterrados al derrumbarse éstos en la mina Shuicheng de la provincia de Guizhou.
Siete trabajadores perdieron la vida y otros cuatro lograron ser rescatados, de acuerdo con la administración local de seguridad laboral de Liupanshui, ciudad en la que se encuentra el yacimiento.
Las causas del accidente están siendo investigadas.
El pasado fin de semana concluyó con un trágico balance de al menos 78 mineros muertos en tres accidentes.
En la mina Yuanhua, situada en la ciudad de Jixi, provincia nororiental de Heilongjiang, ha sido confirmada la muerte de 22 mineros, mientras que otros cinco permanecen desaparecidos, tras producirse una explosión de gas en el yacimiento.
La policía ha detenido a tres gestores de la mina, al mostrar las investigaciones preliminares que la mina fue cerrada a finales de agosto, tras caducar los certificados de seguridad, pese a lo cual continuó su explotación.
En otra tragedia, 32 mineros perdieron la vida y 28 resultaron heridos por la explosión de la mina Changyuan de Fuyuan, condado perteneciente a la provincia suroccidental de Yunnan.
Una tercera explosión ocurrida el domingo sacudió el yacimiento Luweitan de la ciudad de Linfen (provincia septentrional de Shanxi) y se cobró la vida de los 24 mineros que se encontraban bajo tierra.
(28/11/2006, Agencia de Xinhua)