Mucho han trabajado las autoridades chinas para eliminar la corrupción que tan sensiblemente mina la imagen de los responsables gubernamentales locales, sin embargo, parece ser que se trata de una ardua tarea con una historia de más de 2.800 años.
Las inscripciones halladas en dos urnas de bronce desenterradas recientemente en la provincia noroccidental china de Shaanxi cuentan la historia de cómo, en el año 873 a.C, un noble logró sobornar a las autoridades judiciales para esquivar los cargos de apropiación de tierras de cultivo y esclavos que sobre él pesaban.
Las inscripciones de las urnas detallan la historia, narrada en primera persona por Zhou Sheng, quien fue llevado a la justicia por una población enfurecida, según Wu Zhenfeng, miembro del Instituto de Arqueología de Shaanxi.
En su momento un investigador judicial, Shao Bohu, fue enviado al feudo de Zhou, pero éste logró sobornarlo con un jarrón de bronce y un gran instrumento de jade para sus padres. Finalmente Zhou no recibió ningún tipo de sanción y, en compensación por la " amabilidad" de Shao, le entregó un Gui de jade, tablilla puntiaguda propia de los gobernantes en ocasiones especiales.
"Es raro encontrar 'historias de sobornos' en las inscripciones que se remontan a la antigua China. Normalmente los textos versan sobre hechos heroicos, guerras, la bondad de los reyes, o medidas políticas", afirmó Zhang Enxian, director del Museo Zhouyuan en la ciudad de Baoji (Shaanxi).
Las urnas se encuentran entre los 27 hallazgos realizados por seis agricultores en sus tierras de cultivo en Baoji, 110 kilómetros al oeste de Xi'an.
"La interpretación de los arqueólogos no tiene por qué ser exacta", recordó Zhang. "Algunos verbos han sido modificados con el tiempo, lo que dificulta la verificación de la culpabilidad de Zhou".
El profesor Ding Li, perteneciente al Departamento de Derecho de la Universidad Sun Yat-sen, no considera que las acciones de Zhou constituyan lo que en la actualidad se conoce como soborno.
"La legislación criminal china de nuestros días señala que Shao debería haber sido acusado de corrupción judicial, pero Zhou Seng y Shao Bohu eran posiblemente inocentes en su momento, puesto que la legislación nobiliaria durante la dinastía Zhou era mucho menos severa", afirmó Ding.
(21/11/2006, Agencia de Xinhua)