China no persigue lograr un gran superávit comercial con los Estados Unidos, por el contrario, realizará esfuerzos para lograr un equilibrio comercial, indicó hoy en la capital china el ministro de Comercio, Bo Xilai.
Bo realizó estas declaraciones en su encuentro con el secretario de Comercio estadounidense, Carlos Gutiérrez, quien se encuentra de visita en el país asiático encabezando una delegación integrada por 25 empresarios.
Gutiérrez inicia su visita entre la creciente preocupación estadounidense sobre el déficit comercial con China, el cual se elevó a 102,200 millones de dólares USA en los primeros nueve meses de este año.
Según el ministro chino, su país cuenta con una gran reserva de divisas, por lo que no responde a sus intereses sostener un superávit comercial demasiado alto con Estados Unidos.
Bo subrayó que las exportaciones estadounidenses mantienen un rápido crecimiento, especialmente las de los productos agrícolas, con lo que se espera que China se convierta en el tercer mayor mercado de exportación de Estados Unidos en 2007.
En algunas áreas, tales como el sector servicios o el cultural, Estados Unidos cuenta con obvias ventajas sobre China. Asimismo, las filiales o empresas mixtas de las compañías estadounidenses en China también contribuyen al déficit y se benefician de él, destacó Bo, quien consideró que en términos generales el comercio sino-estadounidense mantiene un relativo equilibrio.
Por su parte, Gutiérrez afirmó que las relaciones sino- estaounidenses se encuentran en un punto de viraje. El déficit supone un problema muy importante entre ambos países, pero reducirlo mediante la disminución de las importaciones chinas no es la "estrategia correcta". EEUU debe intensificar sus exportaciones.
El secretario estadounidense expresó su deseo de que ambas partes puedan adoptar activamente medidas para resolver el problema.
La protección de los derechos de propiedad intelectual fue otro elemento importante en la agenda del encuentro entre los dos ministros.
Gutiérrez apreció los esfuerzos y logros realizados por China en materia de protección de los derechos de propiedad intelectual, pero manifestó su deseo de asistir a nuevos avances.
Bo destacó que la protección de los derechos de propiedad intelectual corresponde a los intereses de China, por lo que ambas partes han logrado una fructífera colaboración.
El ministro chino subrayó la creación de 50 centros con apoyo financiero estatal destinados a gestionar la información sobre los casos de violación de los derechos de propiedad intelectual. De igual modo, los tribunales están incrementando el número de casos de este tipo.
Gutiérrez también tiene previsto asistir a una mesa redonda sobre la protección de derechos de propiedad intelectual con funcionarios y empresarios de ambos países.
Durante el encuentro entre Bo y Gutiérrez, ambos intercambiaron sus puntos de vista sobre otros asuntos de interés común, entre ellos la exportación de ternera estadounidense a China, las restricciones estadounidenses a la exportación de alta tecnología, el reconocimiento de China como economía de mercado y la promoción del turismo estadounidense en China.
Bo manifestó su deseo de que Estados Unidos levante las restricciones a la exportación hacia China de alta tecnología, preocupación manifestada por las compañías de ambas naciones. Además, expresó su esperanza de que la parte estadounidense realice esfuerzos sustanciales con respecto al reconocimiento del estatus de economía de mercado de China.
Gutiérrez permanecerá en Beijing durante dos días antes de partir rumbo a Shanghai el miércoles. Además, tiene programado reunirse con la viceprimera ministra, Wu Yi, y el primer ministro Wen Jiabao, y ofrecer una conferencia de prensa.
En Shanghai, Gutiérrez y su delegación comercial continuarán la celebración de encuentros específicos.
Analistas locales señalaron que la visita de Gutiérrez tiene por objeto, en parte, expandir las exportaciones estadounidenses a China.
Los 25 delegados comerciales que acompañan a Gutiérrez pertenecen en su totalidad a grandes compañías, incluidas firmas que ya operan en China como Lucent Technologies o McGraw-Hill, y recién llegadas como Westinghouse y Aon, la segunda mayor aseguradora estadounidense.
Bo y Gutiérrez dialogaron con los delegados tras su encuentro. Los empresarios demandaron al gobierno chino la adopción de medidas para mejorar el entorno inversor en China, señalando como principales necesidades la protección de los derechos de propiedad intelectual, la mejora de la transparencia del mercado y la ampliación de los servicios gubernamentales.
El ministro chino tomó nota de las cuestiones planteadas y afirmó que las autoridades trabajarán en ellas para impulsar las relaciones comerciales sino-estadounidenses.
Asimismo, Bo invitó a los delegados a ampliar su cooperación con China, especialmente en los sectores de energía solar y nuclear, protección ambiental, servicios médicos y el sector minorista; y reiteró que China continúa ofreciendo grandes oportunidades para el sector financiero y las telecomunicaciones.
(14/11/2006, Agencia de Xinhua)