Cuando Ding Junhui comenzó a practicar snooker nunca imaginó que llegaría a ser campeón mundial, millonario, icono nacional y un fenómeno social.
El muchacho chino de 19 años se ha convertido en la segunda persona en la historia, después de Ronnie O'Sullivan, en conseguir tres títulos mundiales, Abierto de China, Abierto de Reino Unido y Abierto de Irlanda del Norte, antes de los 20 años.
"Para mí no se trata de un sueño realizado, ya que nunca soñé esto", confesó Ding.
Ding abandonó la escuela para jugar al snooker a los 11 años, acto que va en contra del valor tradicional chino que aboga por recibir educación para un futuro brillante. Su madre Chen Xijuan también lo consideraba así. Pero su padre pensaba lo contrario y alegó que su hijo podría recibir educación universitaria después de alcanzar el éxito en el billar.
Su padre logró convencer a su esposa y la pareja gastó todo lo que poseía para financiar la carrera de Ding. Pese a las muchas dificultades, la pareja nunca dudó de su decisión.
Ding entrenaba entre 8 y 10 horas diarias al snooker, y algunas veces se sentía aburrido. "Quería ir a jugar con los compañeros, pero sabía que no podía dejarlo porque no tenía otra opción", afirmó Ding.
La recompensa llegó en abril de 2005 cuando Ding conquistó el título del Abierto de China. En diciembre del mismo año, se alzó con el triunfo en el Abierto del Reino Unido tras batir a Nuggets Steve Davis.
Estos dos títulos le han hecho popular en toda China. "Ding es ahora un icono nacional. Su popularidad sólo está por detrás de Yao Ming, jugador de baloncesto chino de la NBA y del campeón olímpico de 110 metros vallas, Liu Xiang", señaló Fan Rongjian, vicepresidente del Grupo Star de Beijing.
El triunfo de Ding también ha salvado a la industria del snooker y billar en China, que a comienzos de 2000 sufrió su peor momento por el poco interés de la gente. Muchas compañías se declararon en bancarrota.
"Ding resucitó a este deporte con su maravillosa presencia en la escena mundial. Lo llamamos el Fenómeno Ding Junhui", señaló Gan Lianfang, vicepresidente de la Asociación de Snooker y Billar de China.
Ding es el quinto jugador mundial. "Es un jugador fantástico con un talento sorprendente. Disfruta del snooker y siempre está aprendiendo. Definitivamente se convertirá en el número 1 del mundo", elogió O'sullivan.
Ding afirmó que nunca ha soñado con ser el número 1 del mundo. "Soy un hombre de acción, no un pensador, lo que tengo que hacer es perfeccionar mis habilidades".
"Si le pregunta: ¿qué es tu infancia? Su contesta es nada pues de verdad no tiene la infancia. Se entregó al snooker. Es el coste de su éxito", dijo su madre.
(19/09/2006, Agencia de Xinhua)