El primer tren de la historia humana pasó hoy el túnel del Monte Kunlun, un legendario recorrido que parecía como invencible, alrededor de las 12:43 (hora de China).
El tren, utilizando la milagrosa vía férrea Qinghai-Tíbet, salió de la ciudad de Golmud, en la provincia noroccidental china de Qinghai, a las 11:05 horas de este sábado.
El escritor estadounidense y viajero de trenes, Paul Theroux, escribió una vez en su novela "Riding and Red Rooster", que el recorrido de Kunlun era "una garantía de que el ferrocarril nunca alcanzaría Lhasa", la capital tibetana.
Pero esta aseveración ha sido rota.
China ha resuelto tres grandes dificultades: acceso a zonas permamentemente heladas; altas altitudes gélidas y protección medioambiental de la meseta, para reescribir la historia mundial de la construcción de ferrocarril, con la puesta en marcha de la línea férrea Qinghai-Tíbet.
Sus más altos puntos están a 5.072 kilómetros sobre el nivel del mar, al menos 200 metros más elevados que el ferrocarril peruano de Los Andes, que anteriormente era el más alto del mundo.
La línea férrea Qinghai-Tíbet se ha convertido en la más larga y alta de pradera en el planeta.
Las tecnologías avanzadas, la experimentada dirección y la eficiencia del equipo de trabajo a cargo de esta obra han convertido lo imposible en posible.
Aún en aquellas áreas donde el más pequeño esfuerzo significaba usar parte de una botella de oxígeno, ni una simple muerte en la alta meseta fue reportada entre los miles de constructores de la vía férrea.
La parte del Monte Kunlun en Qinghai es de 1,200 kilómetros de longitud, con un promedio de altura de 5.500 metros. Mientras el tren recorría el trayecto del Monte Kunlun, muchos pasajeros a bordo se aglomeraban frente a las ventanas para tomar fotos de las montañas nevadas.
"Qué maravilloso escenario", dijo Zeng Tao, un exitado pasajero de Beijing, contemplando la nieve veraniega en el recorrido sobre el Monte Yuzhu.
El tramo de Kunlun comienza en Pamirs en el oeste y se extiende hacia el este unos 2.500 kilómetros hasta la provincia de Qinghai y la parte noroeste de la provincia de Sichuan, situada entre las regiones autónomas de Tíbet y Xinjiang.
Esta zona ostenta picos con alturas de más de 7.000 metros y los más altos glaciares de China.
En la historia de la cultura tradicional de China, el Kunlun disfruta del título de "madre de las miles de montañas". Es el origen de muchos cuentos y leyendas y es pintado los clásicos chinos como el "Pelegrino del Oeste" y la "Canonización de los Dioses", así como ha sido mencionado en numerosas novelas.
Construir un ferrocarril en el Tíbet fue un sueño del Dr. Sun Yat-sen, precursor de la revolución democrática de China, un sueño que no se hizo realidad hasta la Nueva China, que fundada en 1949.
La construcción de la primera fase del ferrocarril Qinghai- Tíbet, un tramo desde Xining, la capital provincial de la provincia de Qinghai, hasta Golmud, comenzó en 1958 e inició operaciones en 1984.
Por razones técnicas y de financiamiento, la construcción de la segunda y más desafiante etapa, entre Golmud y Lhasa, no comenzó hasta junio de 2001.
El ferrocarril Qinghai-Tíbet, con 1,142 kilómetros de largo entre Golmud y Lhasa se completó en octubre de 2005, siendo la primera línea férrea sobre "cielo del mundo" y también la primera conexión del territorio del Himalaya con el resto de China.
(01/07/2006, Agencia de Xinhua)