"Ahora puedo hacer sola casi todo el trabajo de la casa, de manera que mi esposo puede ir a trabajar en Chengdu sin tener que preocuparse por mí”, aseguró Li, natural del poblado de Yingxiu, cerca del epicentro del terremoto.

Li tiene la esperanza de encontrar un trabajo lo más pronto posible, ya que el proyecto que le brinda terapia y capacitación terminará en dos años.

La búsqueda de fondos para el centro es un tema apremiante para Ma Jun, director de la Federación de Discapacitados de Deyang.

Ma expresó que la organización ha estado buscando nuevos donantes y que espera el gobierno ofrezca un gran apoyo.

"La parte de Hong Kong ha establecido un gran estándar y nos corresponde a nosotros hacer ingentes esfuerzos por mantenerlo después de asumir la administración del centro”, apostilló.

El gobierno de Deyang invertirá 40 millones de yuanes para la construcción este año de un centro de rehabilitación de 12,000 metros cuadrados, que ofrecerá servicios de rehabilitación, capacitación de habilidades, cuidadores y hasta ubicación laboral para los discapacitados de Deyang, según Ma.

"La meta de la rehabilitación es ayudar a los discapacitados a reinsertarse en la sociedad”, concluyó.