Algunos de los entrevistados dijeron sentirse solos, inseguros económicamente, preocupados y cansados, las mismas respuestas que se obtendrían de muchas personas -solteras o casadas, mayores o jóvenes-, viviendo y trabajando en ciudades grandes, caras y competitivas.
Algunos también dijeron sentirse presionados por los padres y por la sociedad para casarse en sus veintes, independientemente de haber encontrado o no a la persona adecuada. ¿Acaso los padres están pensando en el dicho concepto de “sobras”?
No hay nada de malo en ser un hombre o una mujer de 30 y estar soltero. No es ser irrespetuoso con los padres ni con las tradiciones sociales, ni es una señal inequívoca de tener una salud débil o de problemas mentales.
Esto no significa tampoco que exista algún problema con aquellos que se casan en sus veintes. Es igual de difícil indicar cuál es la edad óptima para casarse a partir de la edad legal, que indicar cuál es la edad de “caducidad” para hacerlo. Cada persona es diferente… ¿Y acaso el matrimonio no se basa en el amor y no en la edad?
Es simplemente una realidad que la población culta urbana tiende a casarse más tarde que las generaciones anteriores en economías modernas de todo el mundo, incluido en China.